lunes, 12 de octubre de 2020

Mi comentario a “Línea de fuego”, de Arturo Pérez-Reverte

 Mi última lectura:

Título: Línea de fuego.

Autor: Arturo Pérez Reverte.


Otro novelón del que, para un servidor, es el mejor escritor contemporáneo en lengua española.

Analizar concretamente esta novela de Pérez-Reverte conlleva al menos, plantear tres enfoques, aunque sólo me interesan realmente los dos primeros, el resto es carnaza de gente que, en la mayoría de ocasiones, opinará sin leerla y con prejuicios.

El primero de los enfoques, es el valor literario. Es tremenda. Además de ese uso del predicativo por el que, con un adjetivo acertado, quirúrgico, el autor dice en una palabra lo que a otros cuesta un capítulo, está el mundo en que su lectura sumerge ipso facto, una batalla, y con ella un mundo, que vivencias mejor que con cualquier chisme moderno de realidad virtual o aumentada, o lo que sea, y sólo mediante el arte de la palabra apropiada en el momento oportuno.

El segundo aspecto es la obra dentro de la producción literaria del autor, y me parece estar en el mejor estilo revertiano, con exaltación de la lealtad y denuncia de la mezquindad. Por cierto, hay feminismo, del real, no el de pandereta de feminecios, que flaco favor hacen.

Por último, dará que hablar porque, efectivamente, no gustará a acérrimos de uno y otro lado, pues sobre todo emerge de sus páginas el denominador común de lo español, lo que nos une a todos, y lo hace, por encima de convicciones más o menos férreas. La equidistancia, de la que muchos no quieren ni oír hablar, la alcanza de forma sublime a través de la humanidad, y en su caso, vileza, de los personajes, de las personas, de uno y otro bando.  Hablarán pues, probablemente sin leer, los que lo ven todo con la perspectiva de entonces, de hace casi un siglo, idealistas que no reconocen ni lo que hubo, ni lo que perdieron o ganaron y siguen con el toletole, cambiando nombres de calles o destrozando monumentos. Estarán también aquellos que, contentos con la estopa que daba y sigue dando el autor a un lado, no conciben que a ellos se les pueda dar la misma. Y eso, al final, es lo que nos gusta de este autor, que se la sopla lo que digan unos y otros.

Gran novela por encima de todo y todos.

Mi comentario a “Rompamos el hielo” de David Safier

 Mi última lectura 47°/2020 -reto 60-.

Título: Rompamos el hielo.

Autor: David Salieron.



Fábula divertida, tierna y reveladora, recomendable para cualquier persona con independencia de su edad, que rasca en los sentimientos y se asoma a la condición humana y sus emociones desde un tono y una escritura divertida y en momentos desternillante.

Va en la línea de otros títulos del autor de “Maldito Karma”, “Una familia feliz” o “Muuu”. Un autor que escribe de manera brillante, entretenida y jugando siempre con el humor que le permite la licencia de la fábula, que es por otro lado, una de las herramientas con la que todos hemos aprendido valores en nuestra edad más temprana. Eso es lo que hace de Safier uno de mis autores favoritos, su capacidad para tratar temas trascendentales desde esa óptica.

Lo recomiendo para todos, padres, hijos o abuelos. Será muy difícil que no paséis un buen rato con su lectura.

Mi comentario a “Los chicos de la Nickel” de Colson Whitehead

 MI última lectura (46º/2020 -reto 60)

Título: Los chicos de la Nickel

Autor:  Colson Whitehead


Realista. Casi un documental novelado, pero con mucha maestría. Voy a seguir leyendo a este autor. Lo único que ha tenido en contra conmigo es que yo no había guardado el luto necesario al final de un buen libro, tras leer el último de Ken Follet y son tan distintos, que cuesta mucho cambiar el tono. Aún así me ha gustado. Denuncia del segregacionismo y la opresión a la comunidad negra en los años 60 que, desgraciadamente, suena demasiado actual. Es la historia de amistad y supervivencia de dos amigos que van a parar a un reformatorio de Florida. Sin drama, sin condescendencia. Realista.

Mi comentario a “Las tinieblas y el alba” de Ken Follet

 Mi última lectura. 45° / 2020 .

Título: Las tinieblas y el alba.

Autor: Ken Follet.



Más que un libro ha sido una semana de vivir entre la realidad tan paradójica que vivimos y la ficción histórica tan bien contada que nos presenta el genio de Cardiff. Es tan espectacular su capacidad para contar historias, tan sinestésico, que parece que vives cada día con los protagonistas, yendo y vieniendo de Shering a King´s Bridge. Una maravilla. Un clásico contemporáneo. Recuerdo hace 30 años grandes sensaciones similares al terminar “Los pilares de la Tierra”. Celebro ahora revivir esas sensaciones. Casi 1000 páginas, leídas en una semana hasta arriba de trabajo y estrés. Una muestra más del poder de la literatura.

Disfruté mucho con la trilogía del milenio. Tenía el recuerdo de la sensación que me produjo “Los pilares de la Tierra” hace 30 años, pero no me esperaba este nivel de adicción, este gusto por dejar que te cuenten, por hacer de los personajes, villanos y bondadosos, como parte de tu familia. De oler, oír, gustar y ver lo que quiere que sientas el escritor.

Una maravilla.

Mi comentario a “Rotos” de Don Winslow

 Mi última lectura 44°/2020

Título: Rotos.

Autor: Don Winslow.

Brutal. Magnífico. Un libro de relatos. Un desparrame del mejor Winslow, el amo del tono discursivo y la maestría en los diálogos de los personajes. No encuentro otro que atrape más y sea más adictivo en el thriller policíaco. En los relatos, como en sus libros, los personajes se dibujan con sus diálogos repletos de chispa, en una trama vertiginosa. Es difícil no empezar el siguiente relato por el placer que produce la lectura del anterior. Los relatos cuentan con personajes, en ocasiones compartidos (a lo Pulp Fiction), alguno de ellos juega con personajes conocidos como los de “Salvajes”, (Chon, Ben y O), para finalizar con un relato sublime. Hay una crítica social a la América de Trump sólida y mordaz.

Me ha encantado

Mi comentario a “Leviatán” de Paul Auster

 Mi última lectura 43/2020.

Título: Leviatán.

Autor: Paul Auster.


En la víspera de un libro de relatos de Winslow, y con Pérez-Reverte y John Verdon a la vuelta de la esquina, me he calzado un clasicazo de Paul Auster. El de Nueva Jersey, como algún paisano suyo  que conozco bien en el ámbito musical, es un anclaje. Uno de esos escritores que, aunque redactaran las instrucciones de montaje de un mueble de Ikea, leería con pasión.

Sintaxis sencilla pero sólida, contando las cosas como se deben contar. En este tipo de novelas, la trama pasa a un discreto segundo plano y asume el protagonismo la pasión de leer por leer.

Es alentador siempre escritores a los que acudir cuando entra el horror al siguiente libro, o se guarda un luto excesivo por la lectura anterior.

#leoycomparto

Mi comentario a “La buena suerte” de Rosa Montero

 Mi última lectura 42 / 2020 (reto 60)

Título: La buena suerte

Autora: Rosa Montero



Este sí que sí. Mereció la pena la sequía de lanzamientos de agosto para encontrar esta nueva novela de Rosa Montero.

Magnífica, entrañable, redentora y divertida. Una gran historia muy bien contada. Muchas veces ocurre esto. Una historia es más reveladora que 7000 ensayos sobre la esperanza, la suerte o la felicidad. Hay literatura a borbotones, un sutil pero acertadísimo sentido del humor, con una sensibilidad exquisita y convirtiendo en arte a través de la palabra las cosas más cotidianas. Y eso que es una trama que tiene poco de cotidiano. Personajes que crecen con la narración, entrañable, reveladora y muy bien escrita.

Mi comentario a “El bosque de los cuatro vientos” de María Orduña

 Mi última lectura 41/2020 (reto 60)

Título: El bosque de los cuatro vientos.

Autora: María Oruña.



Brevemente, sería buena cosa para el libro acabar entre los 55 que más me hayan gustado en 2020 cuando finalice el año. Igual la decepción viene porque, ante la ausencia de novedades este mes de agosto, en redes se ha movido mucho la expectativa por este libro.

La trama consiste en dos historias que convergen al final, cada una en un momento de la historia de una localidad gallega vinculada a un antiguo monasterio. Hay lugares comunes de otras novelas de monasterios y misterios pero eso es aceptable. Lo que no me gusta es como está escrita. Al margen  de algún laísmo del tipo “...aquello no la disgustaba...”, momento en el que pensé en tirar el iPad en la primera pira purificadora que me encontrara,  la persona narrativa no está definida, o peor aún, es confusa.

Comienza con un protagonista que narra en primera persona y  termina imponiéndooslo de un narrador omnisciente que habla de aquél en tercera (🤔).

Además de tener saltos en los registros o tonos narrativos que van desde oraciones preciosistas y evocadoras hasta un lenguaje casi milenial. 

Los protagonistas, ni se definen ni evolucionan. Una niña muy adelantada a su tiempo, un antropólogo que no tiene ni idea de religión, en fin, le falta verosimilitud. Además, hasta llegar al 60% del libro, es lento de narices. Sólo se salva el toque de galleguismo. 

Vamos, que no me ha gustado, pero como siempre digo, cada libro tiene su lector.Así que, el que a mí no me haya gustado, en modo alguno significa que no os vaya a gustar. Lo importante es leer.

Mi comentario a “Historia del Jazz” de Te Gioia

 Mi última lectura.

Título: Historia del Jazz.

Autor: Ted Gioia.


Esta semana, ante la ausencia de novedades literarias, me he dado un capricho que tenía ganas de hacer desde hace tiempo. He leído una historia del Jazz, conjugando la lectura con la audición de los autores que aparecen en esta ambiciosa y documentada obra divulgativos. Esto, que hace unos años era complejo y caro, ahora, con Apple Music, Spotify, Amazon Music, etc., es fácil. Ha sido una pasada y un disfrute para finalizar las vacaciones. No voy a decir que ahora me gusta todo el jazz porque haya leído esto, ni mucho menos, pero sí que, entendiéndolo mejor y conociendo su evolución, se disfruta más de las líneas o las diversas tendencias del jazz que siempre me han atraído, el cool, modal, jazz-rock, etc. El jazz siempre me ha atraído mucho y sé que nunca lo he entendido lo suficiente. Después de leer esto, tampoco creo que lo vaya a entender, pero sí disfruto más y conozco la historia de muchos grandes que lo han hecho evolucionar.

No se es más erudito en la música porque a uno le guste el jazz más o menos, en modo alguno, pero sí que estoy agradecido al reguetón y a todos estos grupos poperos nuevos que se oyen en la radio, de vocalistas que parece que les lacera la costura de los calzoncillós, porque, por pura insoportabilidad, me han puesto el foco en el jazz.

Y es que hay cosas que, como el reguetón, el Barsa o los escraches que defendiera algún político hace unos años, sin duda, habiendo nacido sin esa vocación, consiguen últimamente, proporcionarme placeres insospechados.

En cuanto al libro, hay muchos nombres, evidentemente y la línea temporal se rompe demasiado, pero aún así, es fácil seguirlo. Conocer, aunque sea brevemente, biografías como las de Charlie Parker, Duke Elington, Miles Davis, Billie Hollyday, Robert Johnson, Scott Joplin, Benny Goodman, Louis Armstron, Bix Beiderbecke, y tantos y tantos otros, merece la pena.

Mi comentario a “A propósito de nada” de Woody Allen

 Mi última lectura, 39°/2020 (reto 60)

Título: A propósito de nada (autobiografía)

Autor: Woody Allen 



Magnífica. Un deleite leerla. Más que leerse, se conecta. Llevo gran parte de mi vida viendo sus películas, sólo por el placer de ver y escuchar alguno de esos comentarios brillantes, en los que juega con el humor más fino y culto, siempre como un guiño al público, a la cultura y a la comedia, y me he encontrado un libro plagado de estos comentarios certeros. Increíble que una persona de 84 años siga tan sublime en su discurrir. Es tan fácil sintonizar con esa longitud de onda con la que escribe, desde la primera página, que el libro se convierte en una experiencia maravillosa. Para el cinéfilo, cosa que yo no me considero, sin tener en cuenta siquiera las interferencias entre mi retina y la pantalla, es un manual de referencia ágil y divertido. Las anécdotas, el ritmo, es como ver la película de su vida dirigida por él. He leído otras autobiografías. Disfruté con la de Phill Collins, con la de Tina Turner y, por motivos casi personales, con la de Bruce Springsteen. Sin embargo, ésta es la más brillante. Respecto a los temas polémicos que han rodeado y clamado contra la vida y la carrera de este genio, por supuesto que están y sólo sirven para convencerme más de lo que siempre he creído, el Nazionalfeminismo, como muchos activismos frenéticos, es capaz de tomar una buena causa y derrumbarla porque, de las ganas de tener un motivo, se llega a la mentira, la calumnia y el postureo desatinado y folklórico que puede conducir, como en este caso, a que se atienda y aplauda la mentira por encima de la verdad. Sólo espero ver que se haga justicia al final, que la mente diabólica que urdió estas mentiras para arruinar al genio inocente, termine con algún tipo de castigo y, en general, que los movimientos que buscan la igualdad no se desfasen y colapsen asumiendo posturas falsas y trasnochadas, considerándolas políticamente correctas o deseables y pierdan toda la fuerza que merecen tener por culpa de extremismos y desquiciamientos. En cualquier caso, me quedo con la globalidad del libro para catalogarlo de una gran autobiografía.

Mi comentario a “Una historia de...” de Juán Eslava Galán

 Mi última lectura.

38°/2020 (reto 60).

Título: Una historia de la geuerra civil que no va a gustar a nadie.


La tenía pendiente en “no ficción” y sí que me ha gustado. Efectivamente no lo hará con los que persisten anclados en este episodio de nuestra historia, del que unos se sienten orgullosos y añorantes, otros acomplejados y vengativos, muchos tratan de censurar y, afortunadamente, otros lo ven con perspectiva histórica y objetiva.  Me gusta la forma desafectada como está contado y esa ironía que plasma lo auténticamente español, lo que nos hermana, que se dio también en el conflicto y que el autor plasma como nadie en este libro. Muy acertado para huir de la subjetividad de quien lo escribe y que cada cual saque sus impresiones. El estilo es Eslava Galán, luego es sinónimo de calidad.

Mi comentario a “Postales del Este” de Reyes Monfortw

 Mi última lectura 37°/2020.

Título: Postales del Este.

Autora: Reyes Monforte.



Aunque pensaba que ya había leído suficiente sobre el tema, y estuve tentado de no leerlo, no me quería perder la buena literatura de la autora. He vuelto a caer, a sufrir, a llenarme de rabia e incomprensión, pero también de humanidad y del valor de la supervivencia. Merece mucho “la pena”. Una lectura que te hace “sentir” en el más amplio espectro de la palabra pero escrita desde la rigurosidad de una novela histórica perfectamente documentada y con las licencias literarias precisas para combinarlas con lo que sí que debería haber sido ficción en la historia de la humanidad, la de personas, por así decirlo  como Josef Mengele o Maria Mandel. 

También es un canto magnífico y precioso a la supervivencia y el valor de las palabras y la escritura.

Mi comentario a “Unorthodox” de Deborah Feldman

 Mi última lectura 36º/2020

Título: Unorthodox

Autora: Deborah Feldman


Autobiográfica e inspiradora. Reconozco que la leí porque me atráia la serie de Netflix pero al haber tanto pasaje hablado en yiddish subtitulado, y como no me alcanza la visual, pues decidí leer la biografía de esta mujer acusada por la comunidad judía ortodoxa de airear sus trapos sucios. Ciertamente, da a conocer una cultura extremista, discriminatoria y, en ocasiones, salvaje, y la historia de una mujer que busca su libertad y la de su hijo. Bien narrada, merece la pena leerse. Feminismo pero sin folklore estridente del activismo nazionalpodemita adoctrinador y cenutrio al que nos hemos acostumbrado.

Mi comentario a “Tirar del hilo” de Andrea Camilleri

 Mi última lectura. 35ª / 2020. Reto 60

Título: Tirar del hilo

Autor: Andrea Camilleri


Es ya una tradición casi fetichista leer a Camilleri en verano. Es algo necesario para mí, como &ver American Graffitti o escuchar a los Beach Boys. Aunque no haya una relación racional entre los libros del autor de Agrigento y la estación estival. Quizá algunos de ellos muestran un paisaje tan tórrido y mediterráneo que me llevan a algo que tanto conozco. En cuanto a ésta, la novela sigue la estructura que espera encontrar el lector. El personaje de Livia, su esposa, aquí es inexistente prácticamente, pero adquiere mayor protagonismo Catarella, con su lengua de trapo desternillante que aporta un anticlimax delicioso. Curiosamente, los habituales de Camilleri pueden notar en las descripciones un mayor uso de los sentidos del oído y el olfato, esto con las comidas de Adelina se nota aún más, y posiblemente, y hablo por experiencia, pueda deberse a que escribió el libro cuando ya le había sobrevenido la ceguera.

Recomendable, pero lo he leído después de otro italiano que se ha revelado con un novelón como es @fabianomassimi y su magnífica “El ángel de Múnich” que me ha eclipsado al maestro siciliano este año.