sábado, 20 de agosto de 2016

Mi comentario a "La Viuda" de Fiona Barton

Pues no está mal para leerlo en dos sentadas sendas tardes de agosto.
Novela negra escrita con buen ritmo y utilizando el estilo poliédrico del narrador que adopta  la perspectiva de un protagonista distinto en cada capítulo. De este modo se teje una telaraña que conjuga perspectiva de personaje y tiempo y que mantiene la tensión hasta la última página.
Suficientemente bien traducido (algún loismo queda por ahí para revisar en próximas ediciones), consigue mantener incómodo y alerta al lector. La temática es sórdida (no voy a adelantar nada) pero no entra en descripciones morbosas gratuitas  como podría haber ocurrido, manteniendo siempre un toque elegante y sobrio que le confiere a la obra mayor interés literario.
Ante la ausencia de grandes títulos como suele ocurrir en verano, pues parece que todos los escritores esperados se reservan siempre  para octubre o noviembre, esta novela es una buena elección.

Mi comentario a "Madera de Líder" de Mario Alonso Puig

Aunque últimamente leo poco ensayo y casi nunca, porque no me gusta, autoayuda, leí este libro porque está escrito por un doctor que está llevando a cabo una interesante investigación acerca de la somatización de las emociones y la capacidad curativa de las mismas.
Es decir, no es un gurú charlatán (ahora divulgadores) que cree haber dado con la receta de la Coca-Cola y piensa que, como mola mucho, debe decirle al mundo lo que debe hacer para molar igual que él. Es otra cosa más seria.
Es cierto que el contenido lo hubiera digerido mejor en formato ensayo que como obra de  la colección Empresa Activa. O, lo que es lo mismo, me sobran los ejercicios que plantea y cosas así.
Sin embargo, ofrece un buen material para reflexionar sobre la inteligencia emocional, la programación neurolingüística y para ver las cosas desde otra perspectiva.

martes, 2 de agosto de 2016

Mi comentario a "Bajo el cielo de los Celtas" de José V. Alfaro

Una bonita historia que sirve para enmarcar la vida de las sociedades celtas antiguas. No tanto las que subsistieron en Irlanda o Escocia hasta la llegada del cristianismo, que también,  sino aquellas centroeuropeas que se enfrentaban con las tribus germanas a comienzos de nuestra era.
A nivel literario es revisable por unos cuantos gazapos (las retinas nos pueden reflejar miedo y cosas así) pero se trata de una historia que sirve para abstraerse y conocer de forma amena las costumbres, la espiritualidad y las leyes de los pueblos celtas en el momento en que pasaron del uso del bronce al uso del hierro en el forjado de sus armas y herramientas.
Druidas, guerreros, naturaleza, todo lo que se puede esperar de una historia contada por un narrador que hace el papel de bardo. Bonita lectura para compartir con los niños.