Excepcional novela que se ha dejado caer el autor cartagenero Antonio Parra. Siendo canónica en cuanto a personajes y roles del género, destaca sobre todo, el dibujo o, mejor dicho, el desnudo de los mismos a través de sus páginas, de sus biografías. En cuanto a su estilo, la considero una manifestación de la evolución del propio autor al que me precio de conocer y con el que disfruto leyéndolo y viéndolo evolucionar. Personajes justos y proporcionados. El lenguaje es alto, proporcionado y acorde cuando hablan los personajes y quizá, por poner algún pero, algo elevado en cuanto al acervo léxico y discursivo que utiliza el narrador en sus descripciones.
Ubicada en la Cartagena de los años 90, la trama atrapa al lector desde el primer párrafo. Se podrá hacer, estoy seguro, una buena serie o película porque es muy cinematográfica. Sin embargo, se despreciará lo que la hace diferente, esto es, ese sacar los muertos del armario del que habla el narrador y que va cincelando la personalidad de todos lo que intervienen.
Ha sido un placer leerla y robarle horas al sueño.
Es un lujo para cartagena con otro escritor de talla y debe serlo para sus alumnos, el contar con un profesor de literatura tan acorde a la materia.
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